Conquistar el miedo = Definir el miedo

Hola todos! Voy a seguir compartiendo ideas de este libro interesante de la Semana de 4 horas de trabajo. Y lo seguiré haciendo porque muchas de las personas a las que se lo recomiendo nunca lo leeran. Asi que me ha parecido válido para quienes leen este Blog leer estos pequeños extractos de ideas, ya que aprovecharán ese conocimiento en sus vidas diarias y en sus situaciones personales. Asi que hoy quería compartir esta parte que me pareció excelente.

Creo que todos sabemos que el miedo es uno de los sentimientos más poderosos del ser humano, y ciertamente en mi opinión, DEFINE muchas cosas de su vida. El miedo te detiene de hacer una gran cantidad de cosas que podrían ayudarte a crecer como persona, a madurar, y es un sentimiento dificil de controlar. Sobre todo el miedo al fracaso. Y el miedo a estar solo. Es por eso que muchas personas que conoceremos en la vida simplemente no intentan cosas nuevas, por miedo a fracasar, o muchas personas dejarán de ser quienes realmente son, y hacer las cosas que les gustan, por miedo a estar solas. Se que conocen a personas asi, y puede quizá que en algunas areas de tu vida te encuentres PARALIZADO por el miedo. Pero anímate, las siguientes ideas les pueden ayudar a avanzar en varios casos, a mi parecer. Comencemos entonces a examinar el titulo de este artículo:

Conquistar el miedo = Definir el miedo

¿Cómo podemos definir el miedo? Es sencillo, a través del “Poder del Pesimismo”. Interesante no? Si aplicamos al máximo nuestro pesimismo a la situación que queremos afrontar, vamos a poder definir cual es el peor escenario de resultados que podemos obtener de llevar a cabo dicha acción a la que tememos. Esto es debido a que sabiendo lo peor que puede suceder, vamos a poder preparar una lista de cosas para afrontar ese peor escenario, y poco a poco te darás cuenta que no es tan grave el asunto. Todo puede ser solucionado de una u otra manera, y con los recursos que tienes y tu entorno. Yo siempre le pregunto a una persona con miedo de hacer algo: Vas a morir? te faltará lo básico para sobrevivir como un techo y comida? generalmente no es asi (a menos que tengas miedo de ir a la guerra, ahi podrías morir ciertamente), y siendo que vas a poder seguir viviendo, entonces lo más importante es evaluar, en este peor escenario, cuando daño temporal y cuanto daño permanente vas a sufrir. Y estos son conceptos interesantes para compartir.

El daño temporal es aquel que, como su nombre lo indica, tiene una duración corta o moderada en el tiempo. Un ejemplo aplicado a la vida diaria sería perder un empleo. Es un impacto temporal porque sigues teniendo las mismas habilidades y conocimientos, y puedes conseguir otro empleo u ocupación. Asi que temporalmente estarías sin ingresos y quizá algo presionado, pero no por mucho tiempo a menos que solo te sientes en una silla a llorar todo el dia. Aplicado al tema de las relaciones, terminar con la pareja tambien es un daño temporal. Muchas personas que han pasado por un rompimiento sienten en ese momento que su vida termina, pero la realidad que es con el pasar del tiempo pueden (y generalmente es así) conocer a otra persona y llevar una vida feliz. Porque no dejan de ser quienes son (una vez que entran en razón, y de esto por cierto escribiré un día jejeje).

El daño permanente es aquel que es para toda la vida. Si tengo un accidente de carro y pierdo una pierna, eso es PERMANENTE. Pero no seamos tan trágicos! Ustedes captaron la idea. Con un breve examen podrán darse cuenta que muchas cosas no son realmente permanentes.

Conociendo estos dos conceptos, y preparándonos para aplicar el poder del pesimismo y definir nuestro peor escenario, tenemos que considerar tambien algo importante. Las consecuencias de no hacer aquello que estamos enfrentando. Y aqui tambien los efectos pueden ser temporales o permanentes.

No olvidemos que la falta de acción generalmente es el problema. Me gusto esta cita:

No hay diferencia entre un pesimista que dice “oh, no hay esperanzas, mejor no hagamos nada”, y un optimista que dice “mejor no hagamos nada, todo va a salir bien de todas formas”.En cualquiera de ambos casos, nada sucede.

Asi que para finalizar, les dejo el cuestionario del libro, que me parecio tan bueno que lo imprimí para compartirlo con mis amistades más cercanas. Apliquenlo a cada situación que tienen miedo de enfrentar y verán que las cosas no son tan terribles como muchas veces pensamos!

  1. Define tu pesadilla, lo peor que pudiera pasar si haces lo que estas considerando hacer. Qué dudas y miedos saltan cuando consideras los grandes cambios que puedes -o debes- realizar? Sería el final de la vida? Cual sería el impacto permanente, i hay alguno, en una escala del 1 al 10? Es realmente permanente? Que tan probable es que suceda esta pesadilla?

  2. ¿Qué pasos podrías tomar para reparar el daño o levantar las cosas nuevamente, incluso si fueran temporales? Lo más probable es que sean más sencillos de lo que imaginas. ¿Cómo volveras a tomar control de las cosas?

  3. ¿Cuales son los resultados o beneficios, tanto temporales o permanentes, de escenarios más probables? Ahora que has definido la pesadilla, cuales son los resultados positivos más probables o definitivos, tanto internos (seguridad, autoestima, etc) o externos? ¿Cuál sería el impacto de estos resultados más probables en una escala del 1 al 10? Que tan probable es que puedas producir al menos un resultado moderadamente bueno? Personas menos inteligentes han hecho esto antes y han salido adelante?

  4. Si fueras despedido de tu trabajo hoy, ¿qué harías para llevar poner las cosas bajo control en el tema financiero? Imagina este escenario y repite las preguntas 1-3. Si renunciaras a tu empleo para probar otras opciones, como podrías nuevamente volver a la carrera que llevabas y tuvieras que hacerlo?

  5. ¿Qué estas logrando con el miedo? Usualmente lo que más tememos es lo que más necesitamos hacer. Esa llamada telefónica, esa conversación, cualquiera que sea la acción -es el miedo al resultado desconocido lo que nos previene de hacer lo que tenemos que hacer. Define el peor caso, acéptalo, y hazlo.

  6. ¿Qué te esta costando -financieramente, emocionalmente y físicamente- posponer la acción? No solo evalues el lado negativo de la acción. Es igualmente importante medir el costo de la inactividad. Si no haces esas cosas que te emocionan, donde estarás en un año, en cinco, y en diez años? ¿Cómo te sentiras habiendo permitido que las circunstancias se impusieran y habiendo permitido que diez años más de tu vida finita pasaran sin hacer esas cosas que realmente te satisfacen? Si te teleportas 10 años al futuro y sabes con 100% de certeza que es un camino de decepciones y arrepentimiento, y si definimos el riesgo como “la probabilidad de un resultado negativo irreversible”, la inactividad es el mayor riesgo de todos.

  7. ¿Qué estas esperando? Si no has respondido estas preguntas sabiendo que el momento perfecto nunca llega para hacer las cosas, entonces, la respuesta es simple: Tienes miedo, igual al resto del mundo. Mide el costo de la inactividad, date cuenta de la poca probabilidad y la reparabilidad de la mayoría de los errores, y desarrolla el más importante habito de la gente que tiene éxito y lo disfruta: la acción.

Bueno, esta lectura de estas preguntas realmente me impactaron, y me he dado cuenta que muchas cosas en mi vida no se han llevado a cabo por miedo. Y que aquellas cosas o situaciones realmente difíciles que he tenido que enfrentar, me han sido más sencillas aplicando las técnicas de este artículo, y definiendo bien los posibles resultados y como me recuperaría de ellos, pero sobre todo midiendo el costo de la inactividad. No nos resignemos a una sitiuación con la que no estemos cómodos, siempre es momento de enfrentar los problemas!

Un abrazo para todos y que Dios los bendiga.

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